Fotos: Delegación Diocesana de Catequesis

En la mañana de este sábado, 5 de abril, se ha celebrado en Toledo el encuentro de niños, adolescentes y catequistas, convocado por las Delegaciones diocesanas de Catequesis y Adolescencia y Juventud, con motivo del Jubileo de la Esperanza, que ha reunido alrededor de 1.500 niños y 400 catequistas de la Archidiócesis.

La Eucaristía ha sido presidida por el obispo auxiliar y secretario general de la Conferencia Episcopal Española, don Francisco César García Magán, quien, en la homilía, ha querido recordar al Arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro, que este fin de semana se encuentra en Tierra Santa para inaugurar una capilla dedicada a la Virgen de Guadalupe, en el Campo de los Pastores de la ciudad palestina de Belén. Por este motivo, ha comenzado pidiendo a todos los participantes una oración por la paz en los Santos Lugares y en todo el mundo.

Después, el obispo auxiliar de Toledo ha recordado el significado del encuentro y de la peregrinación hasta el templo primado, para expresar que «somos peregrinos y testigos de esperanza». En este contexto, ha invitado a todos a preguntarse «quién es Jesús para cada uno» y a hacer del año jubilar un tiempo «de fe confesante». Así, ha querido recordar la misión y vocación de los padres como «educadores y transmisores de la fe para vuestros hijos».

Esperanza en un mundo fragmentado

«En este año jubilar –ha dicho– abramos las puertas a Cristo Redentor y seamos testigos de esperanza en un mundo fragmentando y polarizado, también en España e, incluso, en la propia Iglesia». Por eso, «esta gracia jubilar ha de ser una llamada para anunciar al mundo y a la sociedad de hoy la luz del evangelio. Todos hemos de renovar ese compromiso que es respuesta a la gracia y el don de Dios».

Seguidamente ha querido dar las gracias «a los catequistas, que cumplís vuestra labor desde la gratuidad del don y, por vuestro ministerio sois también padres y madres en la fe de estos niños».

Don Francisco César ha concluido la homilía invitando a todos a volver a sus parroquias «con la alegría de haber compartido la fe y con el compromiso de ser testigos de nuestra esperanza que se llama Cristo resucitado».

Alegría desbordante por las calles de la ciudad de Toledo

Los participantes en la jornada se han congregado a las 10:30 h. en el parque de la Vega, para comenzar el itinerario hasta la catedral, precedidos por la Cruz del Jubileo. Después, en la plaza de Zocodover, ha comenzado la procesión solemne que ha finalizado en la Catedral, donde el obispo auxiliar ha presidido la eucaristía, en la que han participado los coros infantiles de las parroquias de Sonseca y Pantoja.

En la misa, los confirmandos han ofrecido el aceite que será consagrado, en la misa crismal, en la mañana del martes santo, y con el que serán ungidos, durante la próxima Pascua, cuando reciban el sacramento de la confirmación.

Terminada la celebración eucarística, todos participantes se han trasladado a los patios de los seminarios Mayor y Menor, donde, tras la comida, han disfrutado del festival que contaba con la presencia del grupo «Valiván», que ha amenizado la tarde con actuaciones de magia y canciones.