El Arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro Chaves, se ha dirigido a todos los sacerdotes de la Archidiócesis a través de una carta. Lo hace ante los días de descanso estival que muchos sacerdotes llevarán a cabo durante las próximas semanas.
Don Francisco comienza su misiva con un texto del evangelista san Marcos en el que se manifiesta la preocupación del Señor “por el descanso de sus discípulos. Él es consciente del peso del duro trabajo y ve la necesidad de buscar un espacio y un tiempo para descansar.”
El Arzobispo de Toledo subraya que “es necesario el descanso y es necesario hacerlo con el Señor.” Y apunta que la clave para el descanso sacerdotal es “estar unidos al Señor siempre, porque Él es nuestra alegría y donde verdaderamente encontramos nuestro descanso.”
Dos claves para el descanso sacerdotal
El Primado explica que “es importante que el sacerdote hable de todas estas cosas con el Señor”, en referencia a los trabajos llevados a cabo durante el curso pastoral. Y asevera: “Hablar con Él como hacen los amigos contando nuestras inquietudes, las dificultades que encontramos en nuestro quehacer diario, las ilusiones que tenemos para los próximos meses, la respuesta de la gente o la dureza de corazón.”
Otra de las claves, para don Francisco Cerro es que “descansar en el Señor supone dejar que Él siga formando nuestro corazón de buen pastor”.
Asevera el Arzobispo de Toledo: “Qué duda cabe que el sacerdote que descansa en el Corazón de Cristo aprende a mirar, a compadecerse y a enardecer el corazón para que, superado el desaliento, siga entregando la vida por la salvación de las almas.”
Descansar con el Señor y con los hermanos sacerdotes
“Os invito a aprovechar este tiempo veraniego para descansar. Hacedlo en el Señor, para que sea verdadero descanso y al mismo tiempo podáis incorporar a vuestras labores con celo renovado“. Es la exhortación que don Francisco Cerro traslada a los sacerdotes de la Archidiócesis.
Además de recordar que es tiempo propicio para realizar ejercicios espirituales y para llevar a cabo lecturas espirituales, don Francisco Cerro anima a los sacerdotes “a descansar con el Señor y con los hermanos sacerdotes (…) Sería bueno que durante el verano busquéis algunos días para estar con otros sacerdotes descansando juntos y ayudándoles.”
Para acceder al texto completo de la carta dirigida al clero: pinchar aquí.
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