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Arzobispo: “Miremos y gocemos: nuevos hermanos se unen a nosotros, Iglesia de Toledo”

La Santa Iglesia Catedral Primada ha acogido la solemne Vigilia Pascual presidida por el Arzobispo de Toledo y Primado de España, Mons. Braulio Rodríguez Plaza.

La solemne misa ha sido concelebrada por los miembros del Cabildo Primado. Y en el transcurso de la celebración, seis adultos, una mujer y cinco varones, han recibido los sacramentos de la iniciación cristiana: el bautismo, la confirmación y la eucaristía.

Al comienzo de su homilía, el Primado ha querido enfatizar: “Es nuestro grito de alegría en esta noche. Cristo ha descerrajado una puerta que nos estaba cerrada: la puerta que da acceso a una nueva vida, la que ya no conoce ni la enfermedad ni la muerte (…) la Pascua es el día de la nueva creación.

 

Momento del comienzo de la celebración de la Vigilia Pascual

 

La luz, creación de Dios 

Mons. Rodrígue Plaza ha glosado la lectura del Génesis en la que se habla, igualmente, de la creación de la luz: “El que Dios haya creado la luz significa que Dios creó el mundo como un espacio de conocimiento y de verdad. La materia prima del mundo que vemos es buena, el ser es bueno en sí mismo. Y el mal no proviene del ser, que es creado por Dios, sino que existe solo en virtud de la negación. Es el “no”.

 

Uno de los catecúmenos recibe el sacramento de la Confirmación

 

La Luz y la Pascua

Don Braulio ha señalado la vinculación entre la creación divina de la luz y la Pascua: “En la Pascua, pues, en las primeras horas del primer día de la semana, Dios vuelve a decir:” “que exista la luz”. Antes hemos tenido la noche de Getsemaní, el eclipse solar de la Pasión y la Muerte de Jesús, la noche del sepulcro. Pero ahora vuelve a ser el primer día, comienza la creación totalmente nueva. “Que exista la luz”, dice Dios, “y existió la luz”. Jesús resucita del sepulcro. La vida es más fuerte que la muerte. El bien es más fuerte que el mal. El amor es más fuerte que el odio. La verdad es más fuerte que la mentira. La oscuridad de los días pasados se disipa cuando Jesús resurge de la tumba y se hace Él mismo luz para Dios.”

 

Procesión con el Cirio Pascual por las naves de la Catedral

 

El sacramento del Bautismo y la Fe

El Prelado se ha detenido, también, en explicar el valor del sacramento bautismal: “Por el Bautismo y la profesión de fe, el Señor ha constituido un puente para nosotros, a través del cual el nuevo día viene a nosotros. En el Bautismo, el Señor dice a aquel o aquella que lo recibe: Fiat lux, que exista la luz. El nuevo día, el día de la vida indestructible llega también para nosotros.”

A la par que el sacramento del Bautismo, Mons. Rodríguez Plaza ha señalado la virtud de la fe “que nos muestra la luz de Dios, es la verdadera iluminación, es una irrupción de la luz de Dios en nuestro mundo. De modo sencillo, hermanos, pero significativo, la Iglesia presenta en esta noche el misterio de la luz con un símbolo particular y humilde: el cirio pascual de que hemos tomado de su fuego con nuestra vela y que la tomarán nuestros hermanos que serán en pocos minutos bautizados.”

 

El Arzobispo de Toledo pronuncia su homilía en la Vigilia Pascual

 

Nuevos hermanos se unen a la Iglesia

Y para concluir su homilía ha invitado a orar por los catecúmenos que han recibido los sacramentos de la iniciación cristiana durante la Vigilia Pascual: “Ved, hermanos, escuchad, rezad y cantad: la Liturgia del Bautismo empieza. Miremos y gocemos: nuevos hermanos se unen a nosotros, Iglesia de Toledo.”

 

Don Braulio Rodríguez posa junto a los seis adultos que han recibido los sacramentos de la iniciación cristiana

 

Para descargar la homilía de la Vigilia Pascual: pinchar aquí.

 

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